Redondo de pollo con salsa sorpresa

 

La historia de este redondo de pollo con salsa sorpresa viene de hace unos cuantos años. Desde hacía muchos años, por nochevieja, siempre encargaba unos redondos de pollo buenísimos en un lugar de mi pueblo donde hacían comida para llevar. El último año, me fui hacia esa tienda y me dijeron que ya no hacían nada para las fiestas. 

Mi gozo en un pozo...

Entonces, aquél año decidí encargar el redondo de pollo en otro lugar... craso error... Aquí tenéis el resultado de aquella aventura en mi blog de pifias: El pollo mutante

Como podéis ver, aquél pollo fue un desastre total...

Al año siguiente, estaba comentándole mis problemas con el pollo mutante a Paqui, una amiga que siempre me encontraba en el tren. Las dos madrugábamos para ir a trabajar. Le dije que iba a hacer yo los pollos, ya que peor no me iban a salir visto el desastre del año anterior. La idea era intentar hacerlos parecidos a los que encargaba antes con guarnición de patatas pequeñitas, zanahorias baby y cebollitas francesas, pero esos pollos tenían una salsita muy buena, y no creía que supiese cómo hacerlo.

Entonces Paqui me dijo: "¿Y por qué no los haces con una salsa que hago yo y que sale buenísima?"

Y me explicó su historia:

Fue durante su primera comida de Navidad. Tenía pensado hacer también un pollo con una salsa. La receta original de la salsa llevaba trufa... pero ella no sabía que la trufa era un hongo y se fue a la pastelería a comprar trufas de chocolate...

Entonces, cuando estaba comenzando a hacer la salsa, su hermana se pasó por la cocina y vio las trufas. Le dijo que esas no eran, que las trufas eran unas setas muy caras, ¡que no eran las de chocolate! A mi amiga Paqui casi le da un soponcio. El día de Navidad, con todo cerrado, ¡y ella sin las trufas!

Entonces decidió ponerle algo que tuviese por casa. Y fueron unos dátiles.

¡Y la salsa quedó buenísima!

Pero a mi no me servía esa salsa... Llevaba dátiles y mis suegros, mi marido y mi cuñado los odian. Mi amiga Paqui me juró que aunque llevase dátiles, no se iban a dar cuenta. Que se los pusiese a escondidas y que la salsa les encantaría.

Por si las moscas, un par de semanas antes de Navidad hice la prueba con mi marido. Compré un redondo de pollo pequeño y me puse a hacer la salsa. A mi marido le gusta también cocinar, o sea, que estaba por la cocina. Lo último que me quedaba para la salsa era meterle los dátiles a escondidas y triturarla. En cuanto se despistó, metí los dátiles a toda prisa y trituré la salsa. Una vez triturada, la probé... ¡Y aquello sabía a gloria! No se notaba que la salsa llevaba dátiles, pero le daban un toque especial. ¡Buenísimo!

El pollo con la salsa triunfó. Llevo ya 3 años haciendo por nochevieja este pollo con la salsa "sorpresa", como yo le llamo, y a mis suegros, mi cuñado y a mi marido les encanta. Mi marido ya sabe que lleva dátiles, pero como está tan buena, le da igual. Eso sí. a mi familia política no les he dicho nada, porque estoy segura de que si lo supiesen, ya no volverían a probarla... jajaja.

Esta receta puede hacerse con uno o dos redondos de pollo de corral (unas 5 personas para un pollo, unas 10 para dos pollos). Como yo la suelo hacer para Nochevieja suelo hacerlo con 2 pollos, porque somos bastantes, pero no os preocupéis. Pondré tanto la versión para un pollo como para la de dos pollos.

¡Muchas gracias a Paqui por la receta!

Ingredientes para 5 personas (1 pollo)

Para 1 pollo

• 1 redondo de pollo de payés (o de corral) relleno (de unos dos kilos). Yo lo rellené de bacon, pimiento rojo y queso.
• 1/2 kg de patatas.
• Agua para hervir las patatas.
• Cubitos de hielo para enfriar las patatas.
• 150 g. de cebollitas.
• 150 g. de zanahorias baby.
• Ajo en polvo.
• Perejil picado.
• 200 ml. de brandy.
• Aceite.
• Sal.
• Pimienta.

Para la salsa (1 pollo):

• 150 g. de cebolla.
• 100 g. de pimiento verde.
• 1 diente de ajo.
• 1 cucharadita rasa de café de azúcar.
• 4 cucharadas soperas de tomate natural triturado.
• 7 dátiles.
• 100 ml. de la salsa que se obtiene al hornear el pollo.
• Aceite.
• Sal.
• Pimienta.

Ingredientes para 10 personas (2 pollos)

Para los dos pollos

• 2 redondos de pollo de payés (o de corral) rellenos (de unos 2 kilos cada uno). Yo los rellené de bacon, pimiento rojo y queso.
• 1 kg de patatas.
• Agua para hervir las patatas.
• Cubitos de hielo para enfriar las patatas.
• 300 g. de cebollitas.
• 300 g. de zanahorias baby.
• Ajo en polvo.
• Perejil picado.
• 400 ml. de brandy.
• Aceite.
• Sal.
• Pimienta.

Para la salsa (2 pollos):

• 300 g. de cebolla.
• 200 g. de pimiento verde.
• 2 dientes de ajo.
• 1 cucharadita rasa de café de azúcar.
• 8 cucharadas soperas de tomate natural triturado.
• 14 dátiles.
• 200 ml. de la salsa que se obtiene al hornear el pollo.
• Aceite.
• Sal.
• Pimienta.

Preparación:

Comenzamos con las patatas:

- 1/2 kilo de patatas en el caso de 1 pollo.

- 1 kilo de patatas en el caso de 2 pollos.

Lavamos muy bien las patatas con agua abundante.

Ponemos a hervir una olla con agua.

Una vez comience a hervir, añadimos las patatas.

Cuando el agua vuelva a hervir, contamos 5 minutos de reloj. Una vez hayan pasado estos 5 minutos, apagamos el fuego y retiramos las patatas  con cuidado de no quemarnos (yo vierto la olla sobre un colador).

A continuación, ponemos las patatas en un recipiente con agua fría y unos cuantos cubitos de hielo. De esta forma se enfriarán más rápido.

Una vez frías las patatas, las pelamos (cuidado porque al estar un poco cocidas, resbalan) con un pelador y las ponemos en otro recipiente con agua.

A continuación cogemos una bandeja apta para horno lo suficientemente grande para que quepa el pollo (o los pollos) y la guarnición.

Engrasamos la bandeja con aceite. Precalentamos el horno a 230º con calor arriba y abajo.

Salpimentamos el pollo (o los pollos) por todos lados.

Ponemos el pollo (o los pollos) en la bandeja. Si son dos pollos, dejad un poco de espacio en medio y en los lados para la guarnición.

Añadimos las patatas a la bandeja.

Les ponemos sal a las patatas y también ajo en polvo (a gusto del consumidor).

Espolvoreamos las patatas con perejil picado (a gusto del consumidor también)

Añadimos las zanahorias baby.

- 150 gramos para un pollo.

- 300 gramos para dos pollos.

Ponemos también las cebollitas francesas

- 150 gramos para 1 pollo.

- 300 gramos para 2 pollos.

Añadimos el brandy (en realidad yo lo pesé en un vaso, pero se me olvidó hacer la foto, y puse la botella para la foto, para que se vea que se añade brandy... jajaja)

- 200 ml. para 1 pollo.

- 400 ml. para 2 pollos.

Por último, salamos las cebollitas y las zanahorias baby.

Una vez lo tenemos todo preparado, cubrimos la bandeja con papel de aluminio. El pollo tarda varias hora en hacerse y no nos interesa que se nos queme la guarnición.

Para saber si el pollo está hecho o no os recomiendo tener un termómetro sonda apto para horno. Como nosotros teníamos dos pollos, ponemos uno para cada pollo. Si sólo tenéis un termómetro y dos pollos, ponedlo en el pollo más gordo.

Introducimos la bandeja en el horno. El horno tiene que estar a 230º con calor arriba y abajo. Horneamos a esta temperatura durante 30 minutos. 

Una vez hayan pasado los 30 minutos, bajar la temperatura del horno a 180º con calor arriba y abajo.

Si no tenéis termómetro, para que tengáis una idea aproximadamente son 30 minutos por cada kilo de carne.

El pollo está hecho cuando la temperatura del termómetro sonda llega a 85º. Pero recordad, que lo tenemos tapado con papel de aluminio.

Por lo tanto, cuando la temperatura del pollo llegue a 70º, abrimos el horno y retiramos el papel de aluminio para que se dore.

Cerramos el horno y seguimos horneando unos 15 minutos para que se dore.

Mientras tanto, comenzamos a hacer la salsa "sorpresa". Ponemos a calentar una sartén con aceite. Pelamos y partimos en trozos la cebolla.

- 150 gramos de cebolla para 1 pollo.

- 300 gramos de cebolla para 2 pollos.

Una vez esté el aceite caliente, ponemos la cebolla en la sartén y le echamos un poco de sal para que sude.

Partimos el pimiento verde en trozos.

- 100 gramos de pimiento verde para 1 pollo.

- 200 gramos de pimiento verde para 2 pollos.

Lo añadimos a la sartén (mis pimientos estaban congelados, lo que véis blanco es el hielo).

A continuación pelamos el ajo.

- 1 ajo para 1 pollo

- 2 ajos para 2 pollos

Les quitamos el germen que hay en medio del ajo para que no repita y lo ponemos en la sartén.

Tapamos la sartén y vamos sofriendo las verduras a fuego lento y removiendo de tanto en tanto. Si vemos que se nos quedan muy secas, poned un pelín de agua para que se vayan haciendo y no se quemen.

Una vez las verduras estén hechas. añadimos el tomate natural triturado.

- 4 cucharadas soperas de tomate natural triturado para 1 pollo.

- 8 cucharadas soperas de tomate natural triturado para 2 pollos.

Salpimentamos (a gusto del consumidor)

Ponemos la cucharadita rasa de café de azúcar. Da igual si estáis haciendo 1 pollo o 2. Se trata de quitarle un pelín la acidez al tomate. La cantidad de azúcar es la misma en los dos casos.

Continuamos sofriendo las verduras con el tomate a fuego lento. Ponemos la tapa de la sartén y vamos removiendo de tanto en tanto.

Una vez hayan pasado los 15 minutos del pollo (recordemos que le habíamos quitado el papel del horno y se estaba dorando), quitamos los termómetros y damos la vuelta a los pollos (o al pollo) para que se doren por el otro lado. 

Una vez dada la vuelta al pollo (o a los pollos), volvemos a poner los termómetros sonda.

Volvemos a meter el pollo (o los pollos) en el horno y dejamos que se doren por el otro lado. El pollo está hecho cuando la temperatura del termómetro sonda llegue a los 85 grados.

Una vez esté hecho el pollo, lo sacamos del horno y acabamos la salsa.

Ponemos el sofrito de verduras en un recipiente para triturarlo. Puede ser el vaso de una batidora, o en mi caso, en la Thermomix.

Añadimos "el ingrediente sorpresa", o sea, los dátiles.

- 7 dátiles para 1 pollo.

- 14 dátiles para 2 pollos.

En el caso de usar una batidora, batimos hasta triturar bien todos los ingredientes.

En el caso de usar la Thermomix, triturar durante 30 segundos a velocidad progresiva 5-10.

Una vez triturado veréis que la salsa es bastante espesa. Para aligerar la salsa y que también tenga algo de sabor del pollo, coged la bandeja con los pollos y obtened:

- 100 ml. del líquido que se ha obtenido de hornear el pollo (para 1 pollo).

- 200 ml. del líquido que se ha obtenido de hornear los pollos (para 2 pollos).

Vertemos en la salsa.

Si usáis la batidora, volvemos a batir con la batidora hasta que quede una salsa homogénea.

Si usáis la Thermomix, trituramos otra vez 30 segundos a velocidad progresiva 5-10.

¡Y ya está todo hecho!

Antes de servir el pollo, quitad la red con cuidado de no quemaros y partirlo en trozos. A nosotros nos va muy bien usar un cuchillo eléctrico. 

Repartid con la guarnición y la salsa sorpresa a parte. ¡Os va a encantar!

Este año mis suegros no han podido venir a cenar con nosotros, y hemos tenido que enviarles la comida a su casa. Esta es la pinta que tenía el pollo que les mandamos con la guarnición (la salsa la ponemos a parte y que cada uno se ponga la cantidad que desee)

¡Espero que os haya gustado la receta! Si es así, no os perdáis mis actualizaciones. Podéis seguirme haciendo click en "Me gusta" de Facebook, en Twitter, o en Instagram.