Tiramisú de limón

Este tiramisú de limón es uno de los mejores postres que he probado últimamente. Lo tenía en mi lista de pendientes desde hacía bastante tiempo, y la verdad es que lo repetiremos más a menudo, ya que es muy fácil de hacer y el resultado es impresionante.

Nunca me ha gustado el café, y como la receta de tiramisú lleva café, nunca me ha dado por hacerla, pero un día vi esta receta de tiramisú de limón en postres.bz y no me lo pensé dos veces: La guardé para hacerla un día de estos. He variado algunas cosas... por ejemplo, la mía lleva virutas de chocolate por encima porque creo que le da un toque especial. 

Os tengo que decir que sale bastante cantidad. Para que os hagáis una idea, con los ingredientes que os pongo a mi me salieron dos bandejas: Una de 27 x 20 x 5 cm  (es la que os pongo en las fotos) y otra de 21 x 21 x 5 cm, pero estaba tan bueno que en poco tiempo desapareció de la nevera. Además el sabor a limón hace que sea un postre de sabor refrescante.

Ingredientes:

Para el tiramisú

• El zumo de 1 limón
• 400 gr de leche
• 3 huevos
• 350 gr de queso mascarpone
• 1 yogur de limón
• 60 gr de azúcar
• 350 gr de bizcochos de soletilla
• 50 gr. de chocolate blanco
• Una pizca de sal para montar las claras

Para adornar

• 100 gr. de chocolate blanco
• La ralladura de dos limones
• Moras de golosina (o frambuesas naturales)

Preparación:

Primero de todo prepararemos el buttermilk. En un principio hice la buttermilk con 200 gr. de leche y el zumo de medio limón, pero fue insuficiente y tuve que volver a hacer más. Por lo tanto, al final usé 400 gramos de leche y el zumo de un limón entero.

Exprimir un limón y reservar el zumo.

Ponemos en un recipiente o bol la leche. 

Añadir el zumo del limón que habíamos reservado usando un colador para que no caigan trozos o semillas.

Removemos con una cuchara. Tiene que quedar cortado, no os asustéis, no os ha salido mal. Ni se os ocurra tirarlo.

Dejamos reposar un mínimo de 20 minutos.

A continuación separamos las claras de las yemas y ponemos las claras en un bol con una pizca de sal.

Montar las claras hasta que estén a punto de nieve bien firme. Podéis usar una batidora de varillas. Yo usé la KitchenAid, que para hacer estas cosas va de maravilla.

Reservamos las claras montadas. Ponemos las yemas en un bol.

Añadimos a las yemas el queso mascarpone.

Ponemos el azúcar.

Batimos con las varillas durante unos minutos hasta que se haya integrado todo y se haya formado una crema uniforme.

Añadimos el yogur de limón.

Volvemos a batir con las varillas hasta que esté todo integrado.

Vamos añadiendo las claras poco a poco y con una espátula removemos lentamente. Lo haremos con movimientos envolventes de abajo a arriba.

Una vez esté todo integrado montaremos el tiramisú. Humedecemos los bizcochos ligeramente en el buttermilk. Sólo vuelta y vuelta. No queremos que se deshagan.

Una vez humedecido, lo ponemos en la base de la bandeja donde vamos a hacer el tiramisú. Repetimos la operación hasta que tengamos toda la base cubierta con bizcochos humedecidos con buttermilk.

Cubrimos los bizcochos con una primera capa de crema. La alisamos con una espátula.

Repetimos la operación con los bizcochos. Los humedecemos ligeramente en el buttermilk y ponemos una segunda capa de bizcochos en la bandeja.

Ponemos una segunda capa de crema cubriendo los bizcochos. Alisamos la capa de crema con una espátula.

Por último, rallamos el chocolate blanco con un rallador y hacemos virutas.

Aquí tenemos algunas virutas.

Ponemos las virutas sobre la segunda capa de crema.

Cubrimos la bandeja con papel film y reservamos en la nevera un mínimo de 5 horas. Yo lo tuve toda una noche en la nevera.

Para hacer los adornos de chocolate blanco, partimos en trozos el chocolate que habíamos reservado para adornar. Ponemos los trozos en un recipiente apto para microondas. 

Programamos 30 segundos en la opción "Descongelar". Removemos y lo volvemos a introducir otros 30 segundos en la opción de descongelar. Cuando haya acabado el tiempo, volvemos a remover. En principio, al remover la segunda vez, el chocolate tendría que estar derretido. Si no lo está, repetimos la operación. Tened cuidado de que no se os queme.

Ponemos el chocolate derretido en una manga pastelera desechable y le hacemos un pequeño corte en la punta. Lo suficiente como para que salga un hilillo de chocolate para hacer las figuras. Haremos las figuras sobre una lámina de papel para hornear. De esta forma será más fáciles despegarlas.

Partiremos siempre por la punta del triángulo que hará de base. Primero de todo, dibujaremos el triángulo más bajo y ancho. Seguidamente, dibujaremos un triángulo un poco más alto y estrecho, y por último, dibujaremos el más estrecho y alto. Repetiremos el dibujo las veces que deseemos. Ponemos los dibujos de chocolate blanco en el congelador hasta la hora de servir el tiramisú.

Justo antes de servir el tiramisú, rallaremos por encima de las raciones a servir un poco de piel de limón (ojo; sólo por encima de las raciones que vayáis a servir, ya que si vais a dejar el tiramisú en la nevera se os secará la piel rallada de limón). Aseguraos de rallar sólo la parte amarilla, por que si ralláis la parte blanca, amargará. Yo lo que hice fue rallar la piel de limón sobre un plato y una vez rallada, ponerla por encima.

Adornamos cada una de las raciones a servir con un dibujo de chocolate blanco y dos moras de golosina o dos frambuesas naturales.

Importante: Este postre lleva huevo crudo. Se debe de conservar siempre en la nevera si no se consume y aguanta perfectamente tres días.

¡Espero que os haya gustado la receta!. Si es así, no os perdáis mis actualizaciones. Podéis seguirme haciendo click en "Me gusta" de Facebook, añadiéndome en vuestros círculos en Google +, o en Twitter.