Esta es mi receta número 201 del blog, y para celebrar que ya tengo más de doscientas recetas, he decidido hacer estas deliciosas galletas de leopardo. Hace mucho tiempo que quería hacer estas galletas. Al final, hace como un mes, me decidí a hacerlas. La receta que usé fue la de María Lunarillos, pero (perdóname María) el sabor no nos acabó de convencer. Por lo tanto, decidí hacerlas a mi manera haciendo algún cambio. Esta segunda vez volaron. ¡Mi hija no hacía nada más que pedir galletas! jajaja.
Además, la primera vez que las hice me equivoqué con los colores. Cuando corté aquellas galletas pensé que había algo que no me cuadraba, y cuando saqué las galletas del horno me di cuenta de qué era lo que no estaba bien: La parte más clara estaba bien, pero la parte negra y la marrón estaban cambiadas de lugar: La negra dentro y la marrón fuera... Y yo enviando fotos del corte y del paso a paso del horneado a mis amigas y diciéndoles "Son galletas de leopardo"... y ellas pensando "Qué leopardo tan raro... " jajaja. ¡Anda, que ya me vale! jajaja.
En fin, que la segunda vez ya fui con más cuidado con los colores, ¡y salieron chulísimas! No os voy a mentir, son un poco laboriosas de hacer, pero el resultado vale la pena. Sobre todo si las tenéis que regalar a alguien, o las vais a compartir. Son muy vistosas y cuando las ven, alucinan.